Francisco Toscano: “El 79% de los pacientes del Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla no reincide
El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, ha visitado el Hospital Psiquiátrico Penitenciario (HPP) de Sevilla, “un centro de referencia por su labor asistencial en el tratamiento de la salud mental”, según ha destacado durante el encuentro con el gerente de la institución de carácter asistencial, Fernando Ávila, en una visita para conocer la labor y funcionamiento del centro sevillano.
“El 79% de los pacientes no vuelve a cometer un delito y se reinserta de manera exitosa en la sociedad tras su paso por el centro”, ha proseguido Toscano sobre los datos que se desprenden de la labor del Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla,
“El objetivo principal de nuestro trabajo es conseguir la reinserción en la sociedad y la integración de las personas”, ha explicado Ávila sobre la labor que desempeña el equipo formado por 74 trabajadores entre los que se encuentran cuatro médicos especialistas en psiquiatría, dos médicos generales, un director de programas y una subdirectora médica, además de 14 enfermeros, 21 auxiliares de enfermería y 18 celadores. El equipo se completa con dos psicólogas, tres juristas, dos trabajadoras sociales, tres educadores sociales y tres maestros.
Una emisora de radio como terapia
En la actualidad, el Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla, uno de los dos centros dependientes de la Administración General del Estado, cuenta con 159 pacientes, quienes reciben un diagnóstico clínico y un programa de tratamiento individualizado con el fin de vincularlos de nuevo a la sociedad. Como parte de ello, desde el centro se han puesto en marcha entrenamientos de fútbol, talleres de manualidades o ajedrez y una emisora de radio, entre otros, actividades que el subdelegado del Gobierno en Sevilla ha tenido la oportunidad de conocer de la mano de los propios pacientes.
“El objetivo es que se reinserten cuanto antes y las salidas terapeúticas permiten la flexibilidad para lograrlo”, advierte el director sobre un programa que solo en 2024 supuso más de 1.708 actividades fuera del centro y salidas con fines terapéuticos, intervenciones que permiten favorecer la evolución de los pacientes y mantener el vínculo con la sociedad, una de las principales diferencias que el hospital mantiene frente a un centro penitenciario ordinario.
Las salidas corresponden a un amplio abanico e incluyen desde actividades culturales a pernoctaciones en los hogares familiares. En el primer caso, estas se realizan tanto con personal del centro, asociaciones y familias de los pacientes
El perfil del paciente
“La alta integración de los pacientes habla de la buena labor del Estado en el tratamiento de personas con trastorno mental grave y el éxito de la reinserción social que ya se está consiguiendo en Sevilla”, ha valorado Toscano sobre una reinserción generalmente exitosa, determinada también por el apoyo familiar o de vinculación asistencial en su entorno, requisitos que, de cumplirse, reducen casi a cero la reincidencia.
En el caso contrario, el segundo internamiento se produce bajo cargos mucho menores que los que produjeron en el inicio, según el estudio de reincidencia realizado en el hospital por los técnicos Sergio Arias e Inmaculada Giraldez, que, mientras los delitos más habituales en el primer ingreso son el asesinato u homicidio, los reincidentes suelen cometer quebrantamiento, generalmente durante el primer año tras el alta.
El perfil medio del paciente es hombre de mediana edad, con estudios de secundaria, español y con trastorno mental grave. Además, “se aprecia un incremento de la problemática tóxica de los pacientes que ingresan", según ha destacado Ávila sobre los datos del estudio.
Alcalá de Guadaíra
El Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla pasará a sus nuevas instalaciones a inicios de 2026, cuando se finalice la renovación del que fuera el Centro Penitenciario Mujeres de Alcalá de Guadaíra. Por primera vez el centro contará con un recinto propio e independiente, además de disponer de espacios más amplios y por lo tanto más adecuados a los tratamientos de salud mental. La reforma también permitirá la llegada de pacientes mujeres que hasta ahora solo contaban con el centro de Alicante, lo que suponía una dificultad para las familias andaluzas con personas allí internadas.