A partir de mañana, miércoles 24, la Casa de la Provincia de la Diputación de Sevilla tendrá un horario especial para la visita de sus exposiciones durante las fiestas de Navidad y de Reyes Magos. Los días 24, 31 de diciembre y 5 de enero: de 10 a 14 horas. Los días 25 de diciembre, 1 y 6 de enero, el Organismo permanecerá cerrado. El resto de los días, la apertura se realiza según el horario habitual: martes a sábado, de 10 a 14 horas, y de 18 a 21 horas; domingo y festivos, de 10 a 14 horas y lunes, día habitual de cierre.
Recordar que, además de sus dos exposiciones permanentes, ‘Despacho Plácido Fernández Viagas’ y ‘La Imprenta de San Eloy. Pinturas de Joaquín Sáenz’, la Casa de la Provincia de la Diputación tiene ahora mismo disponibles para visita otras tres exposiciones temporales: ‘La pintura del lugar. Viajes y Paisajes’, de José Manuel Pérez Tapias, en la Sala Triunfo hasta febrero; Exposición ‘Plazes’, en la Sala Romero Murube hasta marzo, y ‘Tiempo&Tempo’, en la Sala Provincia hasta el 25 de enero.
REVISAR EL PAISAJE DESDE EL MUNDO ARTÍSTICO PROPIO
La exposición ‘La pintura del lugar. Viajes y paisajes’, de José Manuel Pérez Tapias, organizada por el Área de Cultura y Ciudadanía, nos presenta pinturas y dibujos del artista sevillano, realizados a lo largo de la última década, resultado de su pasión por el dibujo y por la pintura del natural. La muestra está centrada en el paisaje, en el viaje desde un profundo conocimiento del género paisajístico, que revisa y actualiza al contemplarlo desde su propio mundo artístico.
Nacido en 1961, en 1978 entra en la Escuela de Artes y Oficios y posteriormente en la Facultad de Bellas Artes, licenciándose en 1985. Sin embargo, fue en 1981 cuando instala su primer estudio en el barrio de Triana, coincidiendo con el pintor Luis Fernández Salgas. Es aquí donde realizará obras inspiradas en el “fauvismo” y el “expresionismo alemán”, cultivando la figura, el retrato y el paisaje fundamentalmente, dando importancia al color y a la textura.
DOCUMENTAR EL GERMEN DE UNA RUTA DE ARTE MURAL EN LA PROVINCIA
‘Plazes’ recoge, a través de la mirada artística de Miguel Jiménez (fotografía) y Pedro J. Canela (vídeo), la experiencia vivida durante la primera edición del proyecto de la misma denominación, impulsado por la Diputación de Sevilla, a través de su Área de Cultura y Ciudadanía, apoyado por cuatro municipios (Camas, El Viso del Alcor, Los Corrales y Mairena del Aljarafe), comisariado por Delimbo y en el que han participado los artistas Pedro Almeida, Virginia Bersabé, Alberto Montes y Osier Luther, cuyas obras han abordado, desde lenguajes contemporáneos, la historia de las mujeres recoveras, la memoria industrial, el espíritu de la Sierra Sur a través de su paisaje y la tradición agrícola del Aljarafe.
‘Plazes’ nació en 2024 con un propósito claro: crear una colección de arte mural contemporáneo distribuida por los municipios de la provincia, fomentando el acceso a la cultura, fortaleciendo la identidad local y apoyando a los artistas andaluces que desarrollan su trabajo en el territorio. Hasta ahora, cada edición reúne a cuatro creadores que realizan intervenciones site-specific en diálogo con la historia, el paisaje y la comunidad de cada pueblo, generando un itinerario artístico en expansión, un proyecto que aspira a convertirse en un museo al aire libre de referencia.
UNA DOBLE CONCEPCIÓN DEL TIEMPO EN EL ARTE
‘Tiempo & tempo’, organizada por la Fundación Caja Rural del Sur y el Otoño Cultural Iberoamericano, incluye una exposición pictórica, ‘Preludio’, de Juan Carlos Castro Crespo, y otra fotográfica, ‘El tiempo de Alicia’, de Santiago García Galván.
Con respecto a ‘Preludio’, como afirma su comisario, Adolfo Morales, “es un indudable privilegio adentrarse en la mirada de Juan Carlos Castro Crespo, recorrer sus giros, flotar en mitad del aire que lo conmueve, advertir con asombro su ávida capacidad de hacer honor al innato carácter de artista, es esa constante declaración inacabable de energía”.
Por su parte, el escritor Guillermo Arriaga manifiesta sobre la exposición fotográfica ‘El tiempo de Alicia’, “puede ir desde la ironía de una mesa repleta de comensales en cuya cabecera preside el conejo o la imagen de varios hombres vestidos de traje saliendo de una iglesia y en medio, impávido, el conejo los observa. El conejo como un acento que cambia el significado. La pequeña pieza que trastoca el orden y al hacerlo crea lecturas alternas. La mujer afrocubana también rompe lo cotidiano y lo esquemático de esa realidad citadina. Su presencia, que remite a las raíces africanas y europeas conjuntadas en una sola persona, otorga una carga simbólica al cuadro”.
