El Ayuntamiento de Marchena celebró este jueves, en el salón de actos de SODEMAR —sede provisional de la Corporación municipal—, un pleno extraordinario y urgente en el que se aprobó la modificación presupuestaria necesaria para financiar la primera fase de las obras de canalización en la travesía hacia el arroyo del Lavadero.
Un problema histórico desde los años 90
La alcaldesa, María del Mar Romero, explicó ante las cámaras de RTV Marchena, que se trata de una intervención largamente demandada por los vecinos, destinada a resolver el problema de inundabilidad que Marchena arrastra desde los años 90 en la zona comprendida entre el cementerio, la gasolinera y la extractora. "Es una obra muy necesaria y esperada por los afectados", señaló.
Inversión de 1,7 millones
La primera fase del proyecto está valorada en 1.761.147 euros. De esa cantidad, 1 millón procede de una subvención de Diputación, mientras que el Ayuntamiento aportará 761.147 euros con cargo a su remanente positivo de Tesorería. Romero adelantó que la adjudicación se producirá en las próximas semanas y que las obras podrían arrancar a principios de 2026.
Más fases en el futuro
La regidora apuntó que el plan se acometerá por fases debido a la elevada inversión total que requiere, y que ya se están programando los proyectos de las siguientes etapas para presentarlos a futuras convocatorias de ayudas.
Molestias inevitables pero necesarias
Romero reconoció que la coincidencia de múltiples proyectos puede causar molestias: "Tengo cierto coraje porque parece que llegan en periodo electoral, pero no depende de mí, están planificadas desde hace mucho tiempo". La alcaldesa citó también actuaciones que tienen fecha próxima como la del el Arco de la Rosa, calle San Juan, calle Coullaut Valera y la zona del Juzgado, además del futuro complejo deportivo de contacto y la pista de skate.
Una obra clave para evitar inundaciones
La actuación, en su fase 1, se centrará en la zona comprendida entre la cooperativa de aceite, el camino de las Peñuelas, el Cementerio y la parte trasera de la carretera A-364, donde las lluvias provocan recurrentes problemas de acumulación de agua.
El plan contempla la instalación de un sistema de canalización y drenaje para evacuar las aguas pluviales y evitar inundaciones en viviendas y negocios de la zona.