Sevilla registra un aumento de fraudes telefónicos dirigidos a comercios con suplantaciones y amenazas

Los delincuentes utilizan información previa del establecimiento para generar urgencia y obtener pagos indebidos
Policía Nacional
Policía Nacional

En Sevilla se ha detectado en las últimas semanas un incremento de fraudes telefónicos dirigidos a empleados de establecimientos comerciales, en los que los estafadores se hacen pasar por encargados, proveedores o servicios de reparto para solicitar pagos urgentes. Las llamadas, realizadas con números desconocidos o incluso internacionales, buscan aprovechar la presión del momento para que el trabajador no contraste la información con su responsable real.

Suplantación, presión y falsas urgencias como método de engaño

El modus operandi consiste en contactar con el local alegando una incidencia inmediata relacionada con el negocio. Los autores reclaman resolverla sin demora, impiden que el empleado pueda verificar la llamada y, en algunos casos, recurren a amenazas sobre supuestos perjuicios económicos o laborales. El objetivo es lograr que la víctima retire dinero de la caja, realice pagos desde cuentas personales o efectúe operaciones en cajeros automáticos o mediante tarjetas prepago.

Manipulación telefónica y uso de números internacionales

Para reforzar el engaño, los estafadores mantienen la línea ocupada y utilizan prefijos internacionales, como los de México, generando un clima de presión que dificulta la comprobación de los hechos. La falta de contraste inmediato facilita que el trabajador actúe sin poder confirmar la autenticidad de la repentina incidencia.

Recomendaciones para reforzar la prevención en los establecimientos

La Policía Nacional recuerda la importancia de desconfiar de cualquier instrucción inesperada que implique movimientos económicos. Entre las pautas básicas destacan verificar siempre la identidad del interlocutor con el responsable del negocio, evitar facilitar información interna, no atender solicitudes de envío de dinero bajo presión y no aceptar métodos de pago desconocidos. Además, se recomienda informar al personal para detectar estas estafas con mayor rapidez y evitar que los comercios sean víctimas de este tipo de engaños.