La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a tres miembros de un grupo criminal procedente de Nápoles especializado en estafas mediante la venta de teléfonos móviles y relojes inteligentes falsificados. Los investigados acumulaban más de una treintena de hechos delictivos en distintas provincias españolas y tenían reclamaciones judiciales pendientes antes de intentar regresar a Italia.
Un método repetido en áreas de servicio y polígonos
Los estafadores localizaban a sus víctimas en áreas de servicio y polígonos industriales, donde se hacían pasar por repartidores de paquetería. Con la excusa de un pedido que no habían podido entregar, ofrecían un supuesto “pack” formado por un teléfono de alta gama y un reloj inteligente por unos 500 euros, un precio muy inferior al real. Si la víctima descubría que los productos eran réplicas, los autores recurrían a la intimidación e incluso a armas de fuego para consumar el robo.
Regresaban a Italia tras cada periodo de actividad
La investigación comenzó en Córdoba, tras la denuncia de un comprador engañado. Los agentes identificaron primero a un miembro del grupo y, posteriormente, a otros dos individuos vinculados al mismo entramado criminal. Tras cada periodo de actividad en España, los tres regresaban a Italia, acumulando delitos en Córdoba y en Motril sin haber podido ser localizados hasta ahora.
Detenidos cuando iban a abandonar Sevilla
La operación culminó en Sevilla cuando los agentes localizaron el vehículo de alquiler con el que los tres planeaban salir del país. Fueron detenidos como presuntos autores de delitos de robo con violencia e intimidación, estafa, reclamación judicial y pertenencia a grupo criminal. Tras pasar a disposición judicial, uno de ellos ingresó en prisión y los otros dos quedaron en libertad con cargos. El operativo permitió recuperar cerca de 8.000 euros y material falsificado.
